Frases conocidas
Es casi imposible que cualquier persona que viva en Usa o países satélites no haya leído núnca aquella estupidez: «un pequeño paso para el hombre...» pronunciada en el viaje lunar yanqui. Lo que no leerá porque la censura no lo permite, es que el idiota que la pronunció llevaba una chuleta porque fue incapaz de memorizarla.